

Cúantas
veces
hemos ido a despertar a nuestro hijos y nos han dicho esta frase? Mamá no quiero ir al cole. Y es
que se trata de una reacción perfectamente normal,
incluso en adultos.
Averiguar las Causas
Las
razones de que no quieren ir al
"Cole" pueden ser varias. Es posible que se aburran, que se
lleven mal con algún compañero, que no les caiga bien
algún profesor, que sientan presión por las notas o, en
algunos casos, que estén sufriendo una situación de -Bullying-.
Evidentemente,
lo primero que debemos hacer los padres, es averigua r la causa por
la que no quieren ir al colegio para, de esta manera, poder ayudarlos, aunque hay factores que no siempre dependen
de nosotros, como por ejemplo, los problemas de adaptación al
sistema educativo. Nosotros siempre abogamos por un cambio
total del mismo, no de una simple reforma, ya que los niños
necesitan otro sistema más acorde con sus inquietudes y necesidades.
Cuando
el problema
es una mala relación con el
maestro, tenemos que conocer la razón. Debemos tener claro que todos
los profesores tienen como objetivo enseñar y ayudar a los
niños para que en el futuro, sean unas personas de
provecho. Es posible sin embargo, que el método
que utilicen no sea del agrado del niño. Hechos tan nimios
como por ejemplo, que le mande leer en voz alta, puede ser
suficienye para que no quieran ir al cole. La relación con los
compañeros, también es muy importante. A veces, una discusión con
alguno de ellos puede afectarle mucho. "Ojo con el
Bully- ing". En ocasiones, es un motivo y cuesta detectarlo, ya que
no lo suelen expresar por miedo o, simplemente, porque no
son conscientes de que lo tengan que hacer, ya que depende
mucho de la madurez y de la edad del niño.
Cuando la Razón es Fracaso Escolar
Sacar
malas notas
también es un motivo con mucho peso para no querer ir al co- legio,
sobre todo en niños que tienen dificultades de
aprendizaje. En los casos de fracaso escolar, hay un
condicionante extra, que es la baja a autoestima. Se trata de
niños que tienen que destacar de otra forma, normalmente inadecuada, como hablar en clase, molestar a los compañeros
o al profesor, hacerse el gracioso etc...En estos casos, cada vez
que ocurre algo, le llaman la atención o le
y,cuando esto se convierte en una rutina, el niño no quiere ir al
colegio porque está harto, pero el pro- blema es que no sabe
comportarse de otra forma y hay que enseñarle.
Hay
algunos acontecimientos
familiares que
también pueden influir, como el di- vorcio de los padres
o la llegada de un nuevo hermanito. El niño se siente inseguro
y es lógico que no quiera despegarse de sus padres.
Cuando
para nuestro hijo
suponga un problema
ir al colegio, lo primero que de- bemos hacer es ir a hablar con
el tutor para averiguar la razón. La comunicación y la
relación entre familia y escuela, es fundamental para
poder tratar cualquier problema o circunstancia a resolver.







